Más de doscientos oficiales de justicia se manifestaron hoy en las ciudades de Porto y Lisboa, vestidos con sus uniformes y portando pancartas con mensajes reivindicativos. La protesta, organizada por el Sindicato dos Funcionários Judiciais (SFJ), tuvo como objetivo exigir mejores condiciones laborales y salariales para estos profesionales que desempeñan un papel fundamental en el sistema judicial portugués.
La concentración se llevó a cabo en la Plaza de la Liberdade en Porto y en la Plaza del Comercio en Lisboa, dos de las principales plazas de ambas ciudades. Los oficiales de justicia, vestidos con sus característicos uniformes negros, llamaron la atención de los transeúntes y de los medios de comunicación con sus pancartas que rezaban mensajes como “Justicia para los oficiales de justicia” o “Nuestro trabajo es esencial, merecemos un trato justo”.
El SFJ, que representa a más de 4.000 oficiales de justicia en Portugal, ha estado en negociaciones con el gobierno durante meses para mejorar las condiciones laborales de sus miembros. Sin embargo, hasta el momento, no se han logrado avances significativos en las conversaciones. Por ello, los oficiales de justicia han decidido tomar las calles para hacer oír su voz y exigir cambios concretos.
Uno de los principales problemas que afecta a estos profesionales es su salario. Según el SFJ, los oficiales de justicia portugueses son los peor pagados de Europa, lo que hace que muchos de ellos tengan dificultades para llegar a fin de mes. Además, la carga de trabajo es cada vez mayor y las condiciones de trabajo no son las más adecuadas, lo que afecta directamente a la calidad del servicio que prestan. Los oficiales de justicia están cansados de ser los “olvidados” del sistema judicial y reclaman un trato justo y digno para su trabajo.
Los manifestantes también han denunciado la falta de reconocimiento por parte del gobierno y de la sociedad en general. A pesar de su importancia en el funcionamiento del sistema judicial, los oficiales de justicia no reciben el reconocimiento que merecen por su labor. Esta falta de valoración se traduce en una falta de incentivos y en una sensación de desmotivación entre los profesionales.
Durante la manifestación, los oficiales de justicia recibieron el apoyo de otros sindicatos y de la sociedad civil en general. Muchos ciudadanos se acercaron a la concentración para mostrar su solidaridad con los manifestantes y para exigir al gobierno que tome medidas concretas para mejorar las condiciones de trabajo de estos profesionales.
El SFJ ha dejado claro que no se trata solo de una cuestión económica, sino de una cuestión de reconocimiento y dignidad. Los oficiales de justicia son conscientes de la importancia de su trabajo en la sociedad y están dispuestos a seguir luchando por sus derechos y por una justicia más justa y eficiente en Portugal.
En este sentido, el sindicato ha anunciado que continuará con las protestas y que no descartan la posibilidad de convocar una huelga si no se llega a un acuerdo satisfactorio con el gobierno. Los oficiales de justicia están más unidos que nunca y no se darán por vencidos hasta que se cumplan sus demandas.
En resumen, la manifestación de hoy ha sido una muestra de la fuerza y la determinación de los oficiales de justicia portugueses. Han demostrado que están dispuestos a luchar por sus derechos y por una justicia más justa y eficiente en su país. Ahora es responsabilidad del gobierno escuchar sus demandas y tomar medidas concretas para mejorar las condiciones de trabajo de estos profesionales que desempeñan un papel fundamental en el sistema judicial portugués.