En una entrevista al Jornal de Negócios, el premio Nobel de economía Paul Krugman admitió que le sorprende el éxito que Portugal ha tenido durante los últimos años. A pesar de no saber exactamente cómo ha conseguido el país salir triunfante de la recesión, Krugman está convencido de que el turismo y las exportaciones han tenido un papel de gran importancia.
Las recientes cifras de la economía portuguesa proporcionan pruebas abrumadoras de su salud. El PIB real aumentó un 4,3% en 2019, la tasa de desempleo se situó en 8,5%, la inflación fue del 1,4% y el déficit presupuestario fue del -2,4%. Estas estadísticas respaldan la recuperación de Portugal desde la crisis financiera de 2008.
Turismo y exportaciones han sido los principales factores que han contribuido a la recuperación de Portugal. El turismo ha aumentado en un 37% en los últimos cuatro años, contribuyendo con una cuarta parte del PIB del país. El turismo ha sido fundamental para el desarrollo de la economía, ya que ha impulsado el sector de la construcción, el comercio y los servicios.
Además, las exportaciones se han beneficiado de la creciente demanda global de productos de Portugal. El comercio internacional de productos portugueses aumentó un 14% durante 2017, lo que contribuyó en gran parte al crecimiento económico de Portugal en el año pasado. El aumento del comercio internacional ha contribuido significativamente al empleo en el país.
A pesar de que Krugman no es capaz de explicar cómo Portugal ha logrado salir a flote de la crisis financiera, el destacado economista está convencido de que el turismo y las exportaciones han tenido un papel importante en el éxito de la economía portuguesa. Estos factores han contribuido en gran medida al crecimiento económico y al mejoramiento de la calidad de vida de la población portuguesa.
Por lo tanto, se puede concluir que el éxito de Portugal en los últimos años se debe en gran parte al aumento del turismo y las exportaciones. Esto demuestra que el país ha sido capaz de aprovechar al máximo sus fortalezas, a pesar de encontrarse en una situación difícil. Este es un símbolo de esperanza para todos aquellos países que están enfrentando una crisis financiera, ya que muestra que siempre hay una luz al final del túnel.