Según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), en 2022, el rendimiento por hora de la población ocupada blanca fue de R$ 20,10, mientras que el de la población negra o parda fue de R$ 11,80. Esta diferencia de 61,4% es una muestra clara de la desigualdad de ingresos entre los grupos raciales en Brasil.
A pesar de esta desigualdad, la población negra y parda es la mayoría en el mercado laboral brasileño. De acuerdo con el IBGE, el 54,2% de la población ocupada en 2022 era negra o parda, mientras que el 45,8% restante era blanca. Esto significa que, a pesar de la desigualdad salarial, los grupos raciales minoritarios están logrando una mayor presencia en el mercado laboral.
Además, el IBGE también encontró que la tasa de desempleo entre los grupos raciales minoritarios fue significativamente menor que la tasa de desempleo entre los grupos raciales mayoritarios. En 2022, la tasa de desempleo entre los grupos raciales minoritarios fue del 11,3%, mientras que entre los grupos raciales mayoritarios fue del 14,2%. Esto demuestra que los grupos raciales minoritarios están logrando una mayor presencia en el mercado laboral, a pesar de la desigualdad salarial.
A pesar de la desigualdad salarial entre los grupos raciales, hay muchas razones para sentirse optimistas. La mayor presencia de los grupos raciales minoritarios en el mercado laboral es una señal de que el país está avanzando hacia una mayor igualdad de oportunidades. Además, el hecho de que la tasa de desempleo entre los grupos raciales minoritarios sea significativamente menor que la tasa de desempleo entre los grupos raciales mayoritarios es una señal de que los grupos raciales minoritarios están logrando una mayor presencia en el mercado laboral.
Es importante destacar que la desigualdad salarial entre los grupos raciales sigue siendo un problema importante en Brasil. Sin embargo, los datos del IBGE muestran que los grupos raciales minoritarios están logrando una mayor presencia en el mercado laboral, lo que es una señal de que el país está avanzando hacia una mayor igualdad de oportunidades. Esto es algo que debemos celebrar y que nos da esperanza de que, con el tiempo, la desigualdad salarial entre los grupos raciales disminuirá.