Itziar Castro, una joven de 24 años, se sentía mal mientras realizaba un ensayo para un espectáculo de natación sincronizada en una piscina cubierta el pasado lunes. Tras unas horas de práctica, su salud empeoró de forma repentina y fue trasladada a un hospital, donde lamentablemente falleció. El motivo oficial de su muerte aún no ha sido confirmado, pero sus compañeros de equipo afirman que fue una tragedia repentina, sin precedentes.
Itziar era una joven de profundas convicciones y una pasión por su deporte desde su infancia. Desde muy pequeña, a los 4 años de edad, empezó a entrenar en natación sincronizada, deporte que la acompañó durante toda su vida. Se destacó por su impresionante habilidad para trabajar en equipo, su fuerza de voluntad, su trabajo duro y su compromiso con el deporte. Itziar Castro era una nadadora profesional que participaba en competiciones de natación sincronizada en todo el mundo.
Sus compañeros de entrenamiento y familiares la recuerdan como una persona positiva y cariñosa, siempre dispuesta a ayudar a los demás. Se trataba de una joven muy respetada por su dedicación y esfuerzo, una atleta disciplinada que nunca se rendía ni se daba por vencida.
La comunidad del deporte se ha unido para expresar su tristeza por la repentina pérdida de Itziar. Los entrenadores y los compañeros de equipo han estado dando su apoyo y transmitiendo su más profundo pésame a la familia de la joven.
Itziar Castro vivió una vida plena y exitosa, dedicada al deporte y a los demás. Esta joven de verdadera pasión era un ejemplo para otros deportistas, especialmente para los más jóvenes. Su familia y amigos se quedan con un recuerdo inolvidable de una persona maravillosa que imaginamos así: una joven llena de vida, con una sonrisa en su rostro y una mirada hacia el futuro.
Descanse en paz, Itziar Castro. Se te recordará siempre por tu vitalidad y tu compromiso con el deporte.